Entrevista al tallista Francisco Verdugo

El arte sacro sevillano vive su época de esplendor en estos tiempos que corren. Prueba de ello es la vida que gozan los talleres de artesanía cofrade superando crisis recientes y otra en pleno bullicio. Imagineros, doradores, bordadores u orfebres, se afanan en terminar sus obras de manera impecable. De igual manera, el arte de la talla vive su época dorada gracias a la huella que en su momento dejaron maestros tan importantes como lo fueron Manuel Guzmán Bejarano o Antonio Martín.

Hoy hablamos con Francisco Verdugo, tallista sevillano y cerreño de nacimiento. Su vida profesional comenzó en uno de esos corralones de antaño, de los que guardan aun la seña de una época pasada difícil de olvidar, a la sombra de la gubia de Manuel Durán. Su inconfundible estilo lo convierte en uno de los tallistas más prolíficos e importantes del panorama actual. De su taller, salió el último paso de Cristo de los que conforman nuestra Semana Santa.

- ¿Qué es para Francisco Verdugo la Semana Santa?

Algo muy importante como puede serlo para cualquier cofrade, y yo me siento cofrade. Siempre me ha gustado la semana santa y gracias a Dios mi trabajo se vincula a ello debido a la tierra en la que vivimos.

- ¿Cómo fueron tus comienzos en el arte sacro?

En el año 95 en el taller de Manuel Durán González, en la calle Goles. Allí me llevé con él aproximadamente 6 años de aprendiz, y después me establecí por mi cuenta en el mismo corralón donde mi maestro tenía el taller. Si bien me había independizado, el tener a mi maestro cerca de mi taller siempre era un apoyo. A partir de ahí, comencé mi vida en solitario, y con ello enfrentarme a los problemas de los comienzos de un oficio como este, tan complicado.

- ¿Cómo definirías tu estilo de talla?

Principalmente barroco. Intento ser fiel a la esencia de cada estilo artístico, si bien es cierto que el que más represento es el barroco. También tallé, aunque bastante menos, en estilo renacentista, intentando tallar lo más puro posible a la esencia de los distintos ordenes. Dentro de todo ello, cada uno tenemos una impronta y una seña que es como la caligrafía a la hora de escribir. Esto salta sin querer porque de alguna manera, sale tu personalidad a la hora de trabajar.

- ¿Qué innovaciones aporta el paso del nazareno de la Humildad a la Semana Santa de Sevilla?

Más que innovaciones hay aportaciones. Esto es diferente porque en mi opinión, innovar es crear algo nuevo, y aportar es hacer algo diferente con lo que ya existe. Este paso tiene líneas sinuosas y un efecto piramidal total que quise hacerlo visible y gracias a Dios lo conseguí. El canasto tiene descompuesto el plinto o base de arranque, con zonas convergentes en los centros y divergentes en las restantes zonas. La cercanía de los candelabros arropan mucho a la imagen del nazareno y las esquinas del canasto son muy prominentes con el fin de buscar ese punto de separación de la pirámide que quise conseguir. Pienso que es un paso que dentro del barroco y todo lo que conocemos de él, no estamos acostumbrados a ver, si lo observamos de frente nos damos cuenta que no es un paso al uso, no es uno más.

- ¿Es difícil innovar en Sevilla?

Si que lo es, en Sevilla y donde sea. Hay muchos pasos hechos y los estilos están muy “machacados”, por eso es muy difícil aportar e innovar.

- ¿Por qué era necesario una asociación de artesanos? ¿Qué se ha conseguido desde su creación?

Era necesario porque debe haber una entidad que nos ampare a los artesanos. Estos oficios siempre fueron muy individualistas por el hecho de no haber nada que lo regule, y esta asociación ha conseguido servirnos de apoyo y que nos reúna a todos y nos convirtamos en uno para pedir y conseguir lo que haya que conseguir. Demostrar también que no somos ni uno ni dos que vayan por su lado, sino que estamos juntos y así nos hacemos escuchar más que si fuéramos solos. Esto tenía que estar en una tierra como Sevilla, cuna del arte sacro, y demasiado tiempo ha tardado en aparecer.

- ¿Cómo está afectando el Covid-19 a su taller?

Es algo que afecta pero a cada uno de una forma diferente. Yo, gracias a Dios, me estoy escapando decentemente, no con la alegría de otros años, pero no me puedo quejar porque estoy saliendo adelante más o menos de una forma óptima. Tengo a tres personas en mi taller, no estoy solo, y eso complica la cosa, pero por ahora puedo llevar las cosas hacia delante. Espero continuar así hasta que esto acabe por que la verdad es que estoy teniendo suerte, sabiendo que otros compañeros lo están pasando bastante mal.

- ¿Qué proyectos llevas a cabo en el presente y cuales se presentan en el futuro?

Estoy realizando el paso del Nazareno de Rociana, teniendo para esta semana santa el frontal tanto de canasto como del respiradero. Tengo que iniciar el altar de la Virgen del Águila de Alcalá de Guadaíra de estilo gótico y muy elegante que encaja a la perfección con el conjunto de la iglesia y la propia imagen. Para el futuro hay proyectos entregados pero aún no están confirmados, aunque hay buenas perspectivas.

- ¿De Cual de tus obras te sientes más orgulloso y por qué?

Lógicamente y ni que decir tiene yo me siento orgulloso de todo lo que hago, ya que lo hago con todo el cariño y poniéndole todo mi interés, dedicación e ilusión. Todos los trabajos me dan la oportunidad de seguir desarrollando una de las cosas que más amo en esta vida que es mi oficio. Pero si tengo que concretar diría que me siento muy orgulloso del paso del Nazareno de la Humildad del Cerro. ¿Por qué? Este paso a superado con creces mis expectativas, y además que iba para el lugar que es, mi casa, donde yo me crie y lugar que quiero y querré siempre.

- ¿Le queda algún sueño que cumplir dentro de su oficio?

Mi sueño es que nunca me falte el trabajo y pueda llevar hacia delante el taller y las personas que lo forman. Llevamos mucho tiempo juntos y somos una familia, por eso me dolería mucho que bajase el ritmo de trabajo y tuviese que prescindir de uno de ellos, cosa que no quiero plantearme ni pensarlo. Vuelvo a repetir que para mí, todos los trabajos son bonitos sin importar donde vayan. A mí lo que me motiva e ilusiona son las personas que forman las hermandades, que me transmiten a su vez la ilusión hacia lo suyo y su respeto hacia el arte.


EN UN MINUTO

- Una hermandad:

- El Cerro del Águila.

- Un Cristo:

- El Nazareno de la Humildad del Cerro.

- Una Virgen:

- Dolores del Cerro.

- Un lugar para ver pasar una cofradía:

- La estrechez de Matahacas cuando pasa el Palio de la virgen de Gracia y Esperanza.

- Una Banda:

- El Sol.

- Una marcha:

- María.

- Un momento para recordar:

- Sin duda la experiencia que viví en la salida del Cerro del Águila el Martes Santo de 2019 con la primera salida procesional del Nazareno de la Humildad. Cualquiera que estuviese en mi lugar diría lo mismo, ya que fue un momento inolvidable pues se hacia realidad un sueño.