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El Penitente con las hermandades de la provincia: Herrera y la Hermandad del Crucificado

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El Penitente con las hermandades de la provincia: Herrera y la Hermandad del Crucificado

Desde la APP El Penitente Inauguramos una nueva sección donde queremos que conozcáis distintas hermandades de la provincia y su riqueza tan desconocida para muchos. Hay una gran variedad de costumbres y para ello queremos visitar cada rincón, desde la Sierra Norte hasta la Sierra Sur.

Nuestra primera visita ha sido precisamente a la Sierra Sur, nos trasladamos hasta Herrera. Un municipio situado en el centro geográfico de Andalucía, dista menos de una hora de capitales de provincia como Córdoba, Málaga y Sevilla, y a poco más de una hora de Granada.

La Semana Santa de Herrera podríamos decir que se caracteriza por su peculiaridad, recibe mucha influencia de la Semana Santa de Puente Genil por las distintas corporaciones y escenificaciones bíblicas en las procesiones, pero sin perder el sello sevillano.
Con 6.500 habitantes aproximadamente, Herrera pone en la calle en Semana Santa un total de 15 Hermandades y Corporaciones, una de ellas es la Hermandad del Santísimo Cristo Crucificado, la cual nos ha abierto sus puertas de la mano de su Hermano Mayor Francisco Manuel Jurado Moreno. Nico, como le llaman sus conocidos y amigos, nos ha concedido una entrevista para acercarnos la Hermandad de un modo informativo y también personal.

Conozcamos primeramente la historia de la hermandad. Hay muchas dudas y se conoce poco de los orígenes tanto de la hermandad como de la talla del Crucificado. Se sabe que al menos hasta el 1938 procesionaba la Hermandad del Santo Entierro con 3 imágenes, una de ellas era un Crucificado articulado que primero procesionaba en la cruz el Viernes Santo y posteriormente el Sábado Santo en la urna. De esta época la hermandad guarda las sábanas con las que se iconografiaba el descendimiento.

Los documentos de la creación de la hermandad no constan, pero se sabe que es de finales de la década de los 30 o principios de los 40, ya que el primer documento oficial que poseen es de un acto de cultos del año 1942. La Archidiócesis de Sevilla envió un escrito a la hermandad en el que se puede leer que la hermandad fue fundada en tiempo inmemorial.

Se tiene constancia que durante unos años procesionaron en la madrugá del Viernes Santo, actualmente procesionan el Sábado Santo.

La talla del Crucificado es anónima, atribuida a Andrés de Ocampo. Recientemente se ha publicado un libro en Écija que ha contrastado información muy importante como que la talla fue creada el 7 de abril de 1582. Fue encargada por la Hermandad del Dulce Nombre de Écija al pintor Ambrosio Martínez de Torres (en estos tiempos se contrataban al pintor y ellos eran los que elegían al escultor), y que costó 51 ducados a la hermandad. En el 2011 fue restaurado por Manuel Mazuecos, dejando a la luz el sudario tal y como se concebía.

Tampoco se conoce cuando llegó la talla a Herrera, pero a ciencia cierta tuvo que ser en los inicios de la Hermandad ya que en el documento del 42 ya aparece la imagen como titular.

Como se puede apreciar, la hermandad guarda bastante historia aún sin conocer, una lucha constante de sus hermanos. Lo que sí podemos asegurar es que estamos ante una joya de la época barroca.


ENTREVISTA A FRANCISCO MANUEL JURADO MORENO, HERMANO MAYOR DE LA HERMANDAD.

-Buenas tardes Francisco, lo primero agradecerte que nos abras las puertas de vuestra Hermandad y del municipio de Herrera. Es un placer para nosotros. La primera pregunta sería ¿Cuántos años llevas de Hermano Mayor?

Gracias a ustedes por salir a la provincia y conocer toda su riqueza procesional. Pues llevo con este año ya 5 años. El año pasado pedimos una prórroga, y este año viendo la situación nos hemos visto obligados a pedir otra prórroga que está aún pendiente de confirmación por parte del Arzobispado. Solo puedo agradecer estos años vividos y que siga entrando savia nueva como está ocurriendo estos últimos años.

-¿Cómo definirías a la Hermandad del Santísimo Cristo Crucificado de Herrera?

Lo más importante que somos todos iguales, el Hermano Mayor no es más que nadie, aquí todos los votos valen por igual. Todo el que llega nuevo se le acoge como uno más e intentamos que tenga feeling desde primera hora y que se sienta como en casa.

-A día de hoy Francisco, ¿cuántas personas rodean a la hermandad?

Hermanas y hermanos somos unos 350 aproximadamente, rondamos los 50 penitentes, unos 10 acólitos y 70 costaleros (2 cuadrillas completas). En estos últimos años estamos creciendo y ojalá así continúe siendo.

-A parte del Sábado Santo que es el día que procesionáis, ¿Cuál es el día más importante o significativo para la hermandad?

Yo diría el Miércoles Santo. Ese día primero se realiza la misa de hermandad a las 8 de la tarde. Posteriormente el Vía Crucis por las calles de Herrera. He de decir que el pueblo entero se vuelca con nuestro Cristo. Si me lo permites, te voy a contar un momento del recorrido que lo llevamos realizando hace unos años y me parece digno de mención, que es cuando llegamos a la residencia de mayores del pueblo. En el interior de la residencia nos preparan la recepción con mucho cariño y recogimiento, todo oscuro, con un foco y unas telas que cuelgan de las balconeras. Entramos con el Crucificado hasta la recepción y se realiza una estación en ese momento. Los mayores hacen un grandísimo esfuerzo ya que suelen acostarse temprano, pero ese día están todos expectantes esperando el momento, todos ellos se colocan en la balconera perimetral que da a la recepción. Te lo estoy contando y se me están poniendo los pelos de punta (risa nerviosa). Es digno de vivir esa atmósfera que se crea con un silencio sepulcral de todos nuestros mayores y con la única luz de un foco que hace que las miradas acaben en Él.

Y una vez acabamos el Vía Crucis, se efectúa la “clavá” (subida al paso, también se le llama así en Puente Genil). El acto es público y nuevamente el pueblo responde de una forma increíble, no cabe un alfiler en la Iglesia.

-Y un tema que está a la orden del día Francisco, ¿Cómo le está afectando esta pandemia a la hermandad?

Imagino que como a todas, pero también es verdad que este año hemos hecho más obra social que otros años. Además, hemos colaborado con nuestra querida banda de Cornetas y Tambores Coronación de Campillos (Málaga). Trabajan todo el año para nosotros y estamos en la obligación de responderles como se merecen, incluso ya tenemos el contrato firmado para el año que viene.

-En relación entonces a la respuesta anterior, ¿qué obras sociales tiene actualmente la hermandad?

Todos los años en la festividad de la Candelaria realizamos un evento solidario con el objetivo de recaudar fondos, cada año se destina a una causa. Hemos contribuido con Manos Unidas, Open Arms, AECC (Asociación Española contra el Cáncer), otro año fue destinado para restaurar la parroquia y este último año ha sido muy especial, ya que se destinó para la Asociación de niños con miopatías miotubular. Tenemos un hermano con esta afectación y teníamos la obligación cristiana de apoyarlo. He de decir que el pueblo entero se volcó y ha sido el año que más dinero recaudamos. También hemos colaborado con Herrera Solidaria haciéndoles llegar cientos de metros de tela para la realización de batas para el Hospital de Osuna, así como contribuir nuestros vecinos en la medida de lo posible debido a las consecuencias de la pandemia.

-Cambiando un poco de tema y yéndonos a un ámbito más personal, ¿cómo vives el día de la salida de tu hermandad?

Pues yo llevo desde el 2004 siendo costalero del Crucificado, y solo pedí un favor, seguir siendo costalero aunque fuese Hermano Mayor (risas).

-¿Alguna anécdota que se recuerde de la hermandad en la calle Francisco?

Pues hay una anécdota muy graciosa que me contaron, fue que en el año 1962. Transcurría la hermandad por la calle Amargura cuando de repente la cruz de nácar antigua con la que procesionaba el Crucificado se enganchó en un cable que colgaba de un lado al otro de la calle de tal manera que se rompió. El Cristo cayó al suelo fracturándose algunos dedos de las manos. La mala suerte fue que cayó encima de una mujer embarazada que estaba viendo en ese momento la procesión, comentarte que el final fue feliz ya que la mujer que estaba en ese momento en el vientre de su madre me lo ha podido contar ella misma (risas). Los hermanos trasladaron corriendo al Crucificado a la iglesia en andas, pero no se fijaron en ese momento que al Cristo le faltaba algunos dedos. En ese año, justo en frente del accidente había una panadería y además en esos años las calles estaban muy oscuras ya que la iluminación era muy débil. En ese instante una señora creyó haber encontrado los dedos de la mano del Señor y fue hasta la parroquia besándolos. Al llegar a la parroquia iluminada la mujer mayor se dio cuenta de que era un ochío (típico dulce herrereño) y exclamó ¡ya decía yo que los dedos estaban muy dulces!

-Para acabar con la entrevista Francisco, nos gustaría que nos contaras alguna anécdota personal que te haya marcado desde que perteneces a la hermandad.

Pues mi momento más personal y emotivo ha sido precisamente este año. Yo estaba en mi casa este Sábado Santo y “botaba” en el sofá, me sentía extraño y muy nervioso por estar nuestro día grande en mi casa. Llamé a nuestro párroco y le pregunté que si tenía flores (fue la primera excusa que me salió la verdad), finalmente se lo dije directamente, <> y él estaba en la parroquia precisamente porque estaba preparando la misa online, y me dijo que sin problemas que me acercara. Yendo hacia la iglesia tengo que pasar por delante de la casa de la prioste y me vió, y me dijo que a donde iba, le dije que a la iglesia y me pidió por favor que si podía acompañarme, sin dudarlo le dije que sí. Cuando llegamos y lo vimos en su altar nos pegamos una “pechá” de llorar que aún me entran hasta sudores del momento.

Para mí ha sido el momento más impactante de mi vida, nunca habríamos imaginado que una dichosa pandemia nos iba a dejar en casa nuestro día grande, porque si es por la lluvia pues no pasa nada al año siguiente, pero ya lo vives con tus hermanos y tus seres queridos. Pero al llegar y verlo allí tan solo con el foco iluminándolo, te lo estoy contando y me estoy emocionando. Fui a la iglesia sin pensarlo y volvería a hacerlo mil veces más.

El haber podido realizar estación de penitencia junto a mis hijos debajo del Cristo es la otra experiencia única y espero poder vivirla muchos años más.

Francisco muchísimas gracias por abrirnos las puertas de Herrera, de vuestra histórica hermandad y tu corazón a nosotros. Ha sido un verdadero placer y esperamos que a nuestros seguidores les haya gustado tanto como a nosotros y vayan a Herrera a conoceros.

El próximo mes nos trasladaremos a otra localidad sevillana, descarga nuestra APP El Penitente, activa las notificaciones y síguenos en nuestras redes sociales para estar informado en todo momento.

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