Los ayuntamientos serán los responsables de autorizar las procesiones

Como ya conocemos todos, el estado de alarma decretado el pasado 14 de marzo en España a causa de la pandemia del COVID-19 finalizará este próximo domingo. A partir de ese momento serán las comunidades autónomas las que regularán la denominada “nueva normalidad” a partir de entonces.

El propio consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Ramón Aguirre, anunció el pasado viernes, tras la reunión del Consejo de Gobierno, que serán los ayuntamientos los que a partir del próximo domingo deban autorizar los actos de culto en la vía pública. Por lo tanto, serán las propias instituciones locales las que deberán de aprobar las salidas procesionales, traslados, Vía Crucis y cualquier culto que se realice en las calles de la ciudad, siempre y cuando puedan respetarse las medidas de seguridad, algo que parece bastante complicado (en estos momentos) cuando hablamos de procesiones.

Esta noticia, junto a la difundida hace unos días por el presidente de la Conferencia Episcopal Española, cardenal Juan José Omella, en la que anunciaba que se está trabajando en el regreso de las procesiones y romerías garantizando la seguridad y viabilidad de los cultos externos, está siendo muy celebrada por la mayoría de los cofrades.