Fallece el hombre que salvó la vida al Cachorro

En el día de hoy se ha conocido la noticia del fallecimiento de Rafael Blanco Guillén, el hombre que salvó la vida a la imagen del Cristo de la Expiración del incendio ocurrido el 26 de febrero del año 1976.

Todo comenzó tras la finalización del montaje del altar del Quinario de los titulares del Cachorro, cuando Juan Jesús Gómez Terreros y Manuel López Román se percataron através de una ventana de la parte trasera del templo como salía humo.

De inmediato se dirigieron a la puerta principal, en donde había gran cantidad de humo que dificultaba la visión y la propia respiración. Francisco Herrera del Pueyo (diputado de Juventud) y Joaquín Rodríguez Noguera buscaban las llaves pero fue imposible. Entonces en ese instante apareció Rafael Blanco Guillén y se introdujo al saltar el balcón y acceder al interior del templo, pudiendo abrir las puertas del templo.

Minutos más tarde, los presentes accedieron a la capilla mientras se pedía ayuda por parte de los bomberos. Pasado unos diez minutos llegaron al lugar, se produjo el encendido de las luces y focos de atención. En ese instante, todo era una confusión y muchos nervios, el diputado de juventud decía haber tocado los pies del Cachorro cuando se encontraba en llamas.

La Virgen del Patrocinio que se encontraba en el altar del Quinario, quedó carbonizada en el incendio y sus restos fueron trasladados a la sacristía. Pasada ya la calma, tanto el Consejo de Cofradías como instituciones de la ciudad acudieron al lugar. Sobre las once de la noche, se realizó un Vía Crucis con la Cruz de Guía presidido por una imagen de un Crucificado de pequeñas dimensiones por las calles de la feligresía.

Así ocurrieron los hechos más tristes para la corporación del Viernes Santo, gracias a la persona de Rafael Blanco Guillén hoy podemos contemplar a la imagen del Cristo de la Expiración, hoy el Señor lo acogerá en su gloria.